Pues creo que yo he llegado a 7.
A continuación una situación normal.
Hay un momento del día en el cual digo -me tomaría un té-, hay paz pues la bebé duerme y la mayor está entretenida. Pongo agua en una taza y la dejo dos minutos en el microondas.
Algo pasa. El timbre, es el cartero.
Me olvido completamente de la taza y no es hasta media mañana cuando voy a preparar la comida que encuentro mi taza. La vuelvo a calentar, ya que es buena idea tomar algo calentito mientras cocino. Alcanzo a ponerle el saquito, es uno de esos tés ingleses que tanto me gustan.
Llora la morsita, me la tengo que cargar en la mochilita y no puedo tomar algo caliente con ella encima (y tibio ya lo he hecho muchas veces y es feo, o té caliente o te helado, intermedios no).
Allí se queda la taza.
Termino de comer y digo -qué rico sería un té calentito- y voy en busca de la taza perdida.
Al microondas nuevamente (ya empieza a marcarse un aro más obscuro en el interior debido al agua que se va evaporando con cada "calentada" y deja a su paso el tinte del té), pero justo es el momento en el cual la mayor deja de comer y toca lavarle la carita y las manos antes de acostarse a una siestita.
Pues después de unas cuantas canciones y cuentos la menor quiere teta (siempre quiere teta, no quiere que le adelgacen sus cachetes/mofletes). Allí se dirije la portadora de leche.
A la tarde un té con galletas suena bien, pero algo pasa, siempre algo pasa (normalmente lo que pasa es que me olvido las cosas en el microondas, una y otra vez). De las galletas no me olvido, no sé porqué.
Llega la noche y finalmente duermen mis monstruitos, a la 1:28 de la mañana finalmente me puedo tomar mi taza.
Valió la pena la espera.
Lo mismo pero con café con leche y acaba en la nevera para el día siguiente
ResponderEliminarJajaja...como te entiendo!!!!!
ResponderEliminarPero...y lo bien que nos sabe cuando nos podemos llevar la taza a los labios por fin!!!
Un beso.
Jajaja a mi pasa lo mismo pero es lo que hay...somos unas super mamis!!
ResponderEliminarJajaja, ahora que lo dices, el mío ya está casi frío olvidado encima de la mesa... no tengo niños, pero tengo blogs que me entretienen... jajaja.
ResponderEliminarBesos,
Laura.
jajajajaaa!!!!! Té añejo, buenísimo! Yo no creo que haya calentado tantas veces la taza, pero mil veces me la olvido en el microondas también.
ResponderEliminarAnabel, a mí me pasa lo mismo pero con el café,yo creo que nos pasa a todas jejeje. Besos.
ResponderEliminarJe!je! je!!!Muy bueno!!!.
ResponderEliminarUn beso enorme y feliz año!!!
jajaja, por lo que veo eso nos pasa a muchas... a mi con café con leche. Ponerlo a calentar y aprovechar ese minuto o dos para hacer cualquier cosa... y ahí se queda olvidado jajaja.
ResponderEliminarBesos!!
Holaaaaaa..... yo termino tomandomelo fríoooooo ... jajajajja pq ya me da cosa calentarlo ainsssss ... pero es que con tantas atenciones a tantas cosas algunas veces nos pasa ... Besotessssssss
ResponderEliminarAca tambien suele pasar en esta casa y a los 2 .... pero nos entrenemos con otras cosas jeje
ResponderEliminarSí, guapa, y últimamente elevado a la enésima potencia... yo no sé dónde dejé la cabeza...
ResponderEliminarMe hiciste recordar cuando mis hijos eran chiquitos, y eran cuatro.Así que comprendo perfectamente lo que te pasa.
ResponderEliminarRiquísimo el té inglés.
Besos
Y que decir Anabel? maravillosa la manera que tienes de escribir, me reí montones, adore el blog, volvere siempre! Cariños!
ResponderEliminarque bonita historia. La amé!
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